
Se ha hablado mucho de la prohibición de emplear los adverbios acabados en mente en la literatura. Aunque su abuso no está tan extendido en la literatura como pasa con el adjetivo, no se trata de una regla fija, lo cierto es que no conviene abusar de ellos. ¿Cuál es la razón? Así lo explicaba el premio Nobel de Literatura García Márquez:
“La práctica terminó por convencerme de que los adverbios de modo terminados en mente son un vicio empobrecedor. Así que empecé a castigarlos donde me salían al paso, y cada vez me convencía más de que aquella obsesión me obligaba a encontrar formas más ricas y expresivas. Hace mucho tiempo que en mis libros no hay ninguno, salvo en alguna cita textual”.
Gabriel García Márquez. Vivir para contarla.
Como digo no se trata de una norma, pero, en general, el uso de los adverbios acabados en mente perjudica el estilo, ralentiza el ritmo del relato y lo hace parecer académico, así que debemos utilizarlos con moderación. En algunos casos, además, son innecesarios, por redundantes, y la mayoría pueden sustituirse por otro adverbio o por palabras con significado equivalente. Veamos algunos ejemplos:
actualmente: hoy en día; excesivamente: demasiado; indudablemente: sin duda; inicialmente: al principio; finalmente: para terminar; lógicamente, como es lógico; antiguamente: antes, claramente: con claridad; evidentemente, es evidente que; frecuentemente: a menudo, con frecuencia; lentamente: poco a poco; naturalmente: claro que; recientemente: hace poco; rápidamente: de prisa; permanentemente: siempre; necesariamente: a la fuerza; literalmente: al pie de la letra, palabra por palabra; principalmente: sobre todo; únicamente, solamente; exclusivamente: solo, nada más; periódicamente: a menudo, de vez en cuando; completamente, definitivamente, totalmente: del todo, por entero; provisionalmente, momentáneamente, eventualmente: de momento.
Un último apunte: Recuerda que cuando dos o más adverbios acabados en “mente” van uno a continuación del otro, solo el último de ellos toma la terminación en “mente”. Por ejemplo: De forma lenta y progresiva, se diría lenta y progresivamente (lentamente y progresivamente sería incorrecto).

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