Arco de transformación del personaje: definición y tipos

Seguramente hayas oído hablar, alguna vez, del arco de transformación del personaje o arco dramático del personaje. Un término utilizado sobre todo en la escritura de guion, pero que también se emplea en la narrativa en general. El arco de transformación de un personaje hace referencia a la evolución que experimenta un personaje, generalmente el protagonista, en una historia. En narrativa literaria, solemos referirnos a él como el “cambio interno”, cambio que se produce en el personaje a lo largo del nudo. Esta sería una buena definición.

Decía George Lucas que las películas son como las guerras: nadie regresa de ellas siendo el mismo. Algo parecido les ocurre a los personajes de las historias. Como a las personas, a los personajes las experiencias les cambian.

Finn, personaje de la saga de películas de Star Wars, fue uno de los niños reclutados por las fuerzas militares de la Primera Orden. Pero FN-2187 carecía de la crueldad característica de los soldados de las fuerzas de asalto y decidió desertar después de presenciar la masacre de Tuanul. Una experiencia traumática puede fácilmente provocar un cambio en un personaje.

Por eso, si hay algo que no debe faltar en la trama emocional de una novela o relato es precisamente esa evolución del personaje: un protagonista al principio de la historia no es el mismo que al final.

Como sabemos, la estructura narrativa (en los cursos de guion se le denomina arco narrativo) establece que los personajes de nuestras historias tienen un deseo u objetivo. Nosotros, como buenos escritores, sabemos que no debemos ponérselo fácil a los personajes si queremos atraer la atención del lector. Ya lo dice el refrán: “Quien algo quiere, algo le cuesta”. Parte de nuestro trabajo consiste en ponerle obstáculos al protagonista, en diseñar el conflicto narrativo. Y en ese arduo trabajo por lograr su objetivo, el protagonista evolucionará: tendrá un arco de transformación.

Progresión de los arcos de transformación

Antes de analizar los distintos tipos de transformación que un personaje puede experimentar a lo largo de una historia, conviene indicar que estos pueden progresar de tres formas distintas: arco de progresión ascendente, descendente o neutro. Denominados también arco positivo, negativo o plano, según clasifica K.M. Weiland en su libro Creando arcos de personajes.

Con frecuencia nos referimos a ellos como arcos morales del personaje, ya que los cambios y evoluciones a las que hacen referencia, se refieren principalmente a su condición moral.

1-Arco de progresión ascendente o arco positivo

El personaje mejora su carácter o su manera de relacionarse con el mundo.

Este es el arco de personajes más popular. A menudo se le conoce como el arco heroico pues es el más habitual en las historia que siguen el camino del héroe. El protagonista comenzará con diferentes niveles de insatisfacción y negación personal. A lo largo de la historia, se cuestionará las creencias sobre sí mismo y sobre el mundo, hasta que finalmente conquiste a sus demonios internos (probablemente también a sus antagonistas externos) y, como resultado, habrá cambiado de una manera positiva, es decir, a mejor (feliz).

Con frecuencia el arco de cambio positivo viene acompañado de un cambio en las prioridades del personaje. El protagonista suele mostrarse insatisfecho consigo mismo o con su entorno, de ahí el deseo de cambiar. Algo le falta, y luchará por conseguirlo. Sin embargo, no siempre el personaje lo tendrá tan claro. Puede que no quiera reconocer sus carencias, o que no se de cuenta de que realmente no está a gusto. Se autoengaña.

Esas mentiras con frecuencia forman parte del conflicto narrativo interno de la historia. Puede que se diga a sí mismo: No estoy tan mal, hay gente peor. O quizá del tipo: Vale no estoy bien, pero tengo que aguantar porque es solo por un tiempo. Luego la cosa cambiará. O podría ser más derrotista: No merezco otra cosa. Si has hecho el taller de escritura terapéutica te sonarán estas frases: son los pensamientos distorsionantes.

Por ejemplo, Katniss, la protagonista de Los juegos del hambre, la trilogía de Suzanne Collins, experimenta un cambio positivo. También el personaje de Finn, personaje de la saga de Star Wars que hemos mencionado y que acaba uniéndose a la Resistencia.

2-Arco neutro o plano

Cuando el personaje no evoluciona o esta evolución es muy leve.

Muchas historias populares presentan tipos de personajes que ya son esencialmente completos en sí mismos. Ya son héroes y no requieren ningún crecimiento personal notable para ganar la fuerza interior para derrotar a los antagonistas externos. Ellos ya descubrieron la verdad, su verdad. No se cuentan mentiras, aunque acontecimientos externos pueden producir que su mundo se tambalee, que surjan las dudas. ¿Y si lo que yo creía no es cierto? ¿Estoy haciendo lo correcto? ¿Estoy siendo sensato? ¿Soy demasiado inflexible? Pese a todo, por lo general, superarán los obstáculos y pruebas del camino, y serán fieles a su verdad. En ocasiones, la “verdad” del protagonista actúa como un símbolo que es destruido y que él deberá recomponer.

Estos protagonistas experimentan poco o ningún cambio a lo largo de la historia, lo que hace que sus arcos sean estáticos o “planos”. Pero estos personajes son los catalizadores del cambio en el mundo de la historia que los rodea, provocando arcos de crecimiento prominentes en los personajes secundarios.

3-Arco de progresión descendente o arco negativo

El personaje reacciona de forma negativa a los acontecimientos. Habitualmente, la frustración por no lograr su objetivo le lleva a convertirse en peor persona. En otros casos, lo que sucede es que lucha por conseguir lo que él cree su verdad, pero su verdad es en realidad una mentira.

Los arcos de cambio negativo ofrecen, posiblemente, más variaciones que cualquiera de los otros arcos. El arco de cambio negativo es un arco de cambio positivo invertido. En lugar de un personaje que crece a partir de sus defectos y se convierte en una mejor persona, el arco del cambio negativo presenta un personaje que termina en un estado peor (moralmente) del que tenía cuando comenzó la historia.

Pero también se considera un arco descendente el arco de la desilusión, el personaje no se convierte en una mala persona, e incluso puede ser mejor de lo que era, pero el desenlace no es para nada el deseado. ¿La razón? El personaje era feliz viviendo una mentira, al descubrirla, llega la desilusión. Sí, ahora tiene la verdad, pero la invade la infelicidad. A diferencia del arco positivo, en el arco positivo el personaje vivía también una mentira, pero esa mentira no le hacía feliz. Aquí, la mentira era el cobijo de la falsa felicidad.

Por ejemplo, Carrie, la protagonista de la novela de Stephen King que lleva por título su nombre.

Tipos de arcos dramáticos del personaje

 A continuación, voy a tratar de clasificar los arcos dramáticos del personaje y poner algunos ejemplos.

En algunos blogs literarios he podido leer alguna clasificación de los arcos de personajes en función de si evolucionan interior o exteriormente. En mi opinión, el arco de personaje, el cambio del protagonista, solo se refiere a cambios internos. Estos cambios pueden, además, implicar cambios externos, o incluso cambios en las circunstancias del personaje. De hecho, es muy frecuente que los cambios internos se reflejen de algún modo externamente. Pero la evolución hace referencia a los aspectos interiores y psicológicos del personaje. Sin un cambio interno, no se produce una verdadera evolución. De hecho, un personaje puede cambiar de “máscara” o de apariencia externa, pero en el fondo seguir siendo el mismo.

De todas las clasificaciones que he podido encontrar, la que me ha parecido más interesante y precisa es la que figura en el libro Estrategias de guion cinematográfico de Antonio Sánchez Escalonilla, y que tomo como esquema para redactar este artículo.

1-Arco de personaje plano

Un arco plano de personaje implica que bien el personaje no evoluciona bien su evolución es muy pequeña. Los personajes con arco plano no pueden dejar de ser quien son. Este tipo de arco de transformación es habitual en los personajes secundarios, en los personajes arquetípicos y en los estereotipos.

No es frecuente, pero algunos protagonistas pueden tener un arco de evolución plano. En estos casos, la historia no hace más que reafirmar su personalidad. El desenlace es, por tanto, la culminación de ella. Estos personajes tienen un perfil psicológico muy rígido, son íntegros e intachables en el caso de los héroes, o tiranos maléficos sin remedio en el caso de los villanos, como sucede con frecuencia en el mundo del cómic.

El hecho de tener un protagonista con arco plano no implica que se desmorone la estructura narrativa de nuestra historia. El protagonista plano puede igualmente luchar por su deseo y enfrentarse a los conflictos, solo que, al final del texto, queda patente su imposibilidad de cambiar. Ese sea quizá el único cambio posible: el reconocimiento de lo que es y de lo que no puede ser. Con frecuencia en estos casos, son los personajes que rodean al protagonista, los personajes secundarios, los que se transforman por su influencia.

 2-Transformación radical o arco radical

Un personaje sufre un cambio radical cuando se produce un cambio de personalidad. Podemos decir que su tendencia vital dominante cambia a otra totalmente distinta. Por ejemplo, un personaje introvertido se convierte en extrovertido o viceversa. Un impulsivo, en reflexivo.

Este cambio normalmente implica que cambie de hábitos e inicie una vida nueva. Es por eso frecuente en historias protagonizadas por personajes jóvenes e inmaduros (novelas de aprendizaje o bildungsromans), como Holden Caulfield, el protagonista de El guardián entre el centeno, aunque no es algo exclusivo de ellos.

Dentro de este arco de transformación radical, pueden diferenciarse tres subtipos:

2.1- Arco radical que afecta a la estabilidad.

Es un arco que produce un cambio de tendencia vital que afecta al binomio estable-inestable.

En este tipo de arco de transformación el personaje modifica sustancialmente la tendencia dominante de su temperamento. El colérico puede convertirse en sanguíneo y el melancólico en flemático.

Un ejemplo de este tipo de arco es el que experimenta el personaje de Todd Anderson en El club de los poetas muertos, novela de Nancy H. Kleinbaum en la que se basó la película con el mismo título. ​Todd es un chico introvertido, cohibido y de comportamiento rígido. Gracias a la influencia de su profesor John Keating y de sus compañeros, ganará confianza en sí mismo y dejará de lado su temperamento melancólico (inestable) para convertirse en flemático (estable). Supongo que recordarás la celebre frase: “Oh capitán, mi capitán”.

2.2- Arco radical que afecta a la extraversión.

Se refiere a un cambio de tendencia vital que afecta al binomio introversión-extraversión.

En este tipo de arco de transformación el personaje cambia su personalidad en cuanto a la relación con el exterior, pudiendo pasar de introvertido a extravertido o viceversa.

Un ejemplo de este tipo de evolución es la que sufre el protagonista de Sostiene Pereira, de Antonio Tabuchi. La novela trascurre en Portugal, durante la dictadura de Salazar. Pereira es un hombre tranquilo que trabaja como director de la sección cultural del Lisboa, en teoría un periódico independiente, y hasta ese momento se ha dedicado a escribir necrológicas de escritores y a la traducción de relatos en francés. Hasta ese momento, su vida es la literatura y el periódico.

La influencia del joven Monteiro Rossi y de su novia Marta, defensores de la República, provocarán una transformación, tanto física como psicológica, en Pereira que le obligarán a salir de su conformismo y tomar partido en la situación política de su país. Esos cambios internos se reflejarán también externamente en Pereira, por ejemplo, en su pérdida de peso.

Pereira es un hombre católico y lleva una vida resignada. No está interesado en la política, solo en la cultura. Pero la apacible y conformista existencia de Pereira se ve alterada cuando conoce al joven Monteiro Rossi. Finalmente, se verá forzado a enfrentarse a la censura y a tomar partido en la lucha por la libertad de expresión.

2.3- Arco radical que no afecta al temperamento.

Implica también un cambio de tendencia vital, pero no en el plano estable-inestable ni tampoco afecta al binomio introversión-extraversión. Hay un cambio de actitud sí, pero sin que se modifique su temperamento.

 Un ejemplo de arco radical que no afecta al temperamento es el que sufre Bianca, protagonista y narradora de Una novelita lumpen, de Roberto Bolaño.

Ella y su hermano quedan huérfanos tras la muerte de sus padres en un accidente de coche. Pronto abandonan los estudios, y subsisten con la pensión de orfandad y algún que otro trabajo. Un día dos amigos de su hermano se instalan en su casa y les proponen un plan: robar a un actor ciego retirado que esconde dinero y joyas en una casa fuerte escondida en su casa. La excusa para establecer contacto con él será ofrecer a Bianca como prostituta.

A lo largo de la novela, el temperamento melancólico de Blanca no cambia, pero la experiencia vivida provoca que la protagonista dé un paso adelante hacia el camino de su madurez para coger con fuerza las riendas de su vida.

 3-Arco de evolución moderado

Suelen implicar un refuerzo en el carácter del personaje, sin que llegue a producirse una transformación importante. Es frecuente este tipo de arco en los personajes secundarios, o en protagonistas que desean y descubren la posibilidad de cambio, pero no se atreven a dar el paso.

El arco moderado también se observa en sagas de novelas y series de televisión, donde el cambio del personajes es progresivo a lo largo de los diferentes libros o temporadas. En estos casos, en el primer libro de la saga, o la primera temporada, el personaje puede experimentar un arco moderado, que en progresión a lo largo de los distintos episodios, se convierte en una transformación radical. Es el caso de Walter White, el personaje de la serie Breaking Bad.

4-Arco traumático

Es el grado extremo de arco de transformación. El protagonista sufre una crisis importante que le lleva a experimentar un cambio de personalidad. Se puede decir que se convierte en otra persona completamente distinta.

Normalmente este arco se produce por algún tipo de trauma que, en ocasiones, afecta de tal manera al personaje que no es posible mostrar su nueva personalidad pues se produce un suicidio inesperado. Esto es lo que le ocurre al personaje de Neil Perry, compañero de clase de Todd Anderson en la novela El club de los poetas muertos, que ve frustrado su deseo de ser actor por el rechazo de su padre autoritario.

Este tipo de arco puede encontrarse en progresión descendente, principalmente, un personaje que acaba quitándose la vida. Pero también en progresión ascendente, cuando se inicia la historia con un intento de suicidio del protagonista que, finalmente, decide no llevar a cabo o no materializar.

En la Metamorfosis de Kafka, Gregor Samsa es un comerciante de tejidos que un día se despierta convertido en un insecto. Hasta entonces, la economía familiar dependía principalmente de su trabajo. Tras ser repudiado por su familia, y sentir que su situación es irremediable, se encierra en su habitación sin alimentarse hasta que finalmente muere. Este sería un ejemplo de arco traumático descendente.

Gregor Samsa experimenta un arco de transformación radical. Su evolución más importante no es la externa (una mañana despierta convertido en un escarabajo), sino la interna, provocada por el hecho de sentirse una persona inútil, incapaz de sacar adelante a su familia.

El caso contrario, arco traumático ascendente, es el que se produce en Verónika decide morir, de Paulo Coelho. Verónika, una joven de 24 años, no es feliz e intenta quitarse la vida tomando pastillas. Su familia la ingresa en un centro psiquiátrico. Pero su estancia allí y su amor por otro de los pacientes producirán en ella un cambio vital.

5-Transformación circular

La transformación circular describe una evolución más compleja. Puede decirse que, en cierto modo, sufren una doble transformación. Primero, sufre una alteración durante el nudo del relato, radical o moderada, que puede ser con progresión positiva o negativa. Pero cuando llega a su momento crítico, retrocede a la posición inicial. Es como una involución final. No puede decirse, sin embargo, que el personaje sea el mismo que al principio, pues se encuentra en un nivel moral superior.

Para entender mejor este artículo tal vez te interese la descripción psicológica del personaje literario.

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Bibliografía:

Creating Characters Arcs. K.M. Weiland. Amazon editorial.

Creating Characters Arcs Woorbook. K.M. Weiland. Amazon editorial.

Estrategias de guion cinematográfico. Antonio Sánchez Escalonilla. Editorial Ariel.